Un sistema de calefacción más eficiente depende del tamaño de su casa
¿Qué calefacción es la mejor? ¿Depende de su gas natural? ¿Radiador eléctrico? ¿Brasero? ¿Gas propano? ¿Horno de butano? Todos los sistemas de calefacción tienen sus ventajas.
Cómo calentar y ahorrar calor de manera eficiente
Los propietarios de apartamentos pequeños pueden elegir calefacción eléctrica, gas natural, gas propano y butano. Las casas unifamiliares también se pueden calentar con tanques de gasóleo y propano a granel. La consultora energética Selectra realizó un estudio para determinar qué tipo de calefacción es mejor para cada tipo de hogar. Ésta es su principal conclusión.
El propano, regulado por el estado, es asequible
El gas propano por tuberías existe en urbanizaciones y pequeñas ciudades sin servicios de red de gas natural. Selectra afirmó que el propano por tuberías es la fuente de energía más barata porque su coste está regulado por el estado. «Esta característica significa que tiene una rentabilidad limitada para la empresa, y este tipo de instalación es escasa». El problema es que el propano no está disponible en muchos lugares. Con propano (11 kg) se puede calentar una vivienda de 50 metros de altura por sólo 384 euros al año, y una vivienda de 120 metros de altura por poco más de 1.000 euros.
Además, la instalación de propano a granel y en botella de 35 kg también requiere que los usuarios presten atención al reemplazo antes de que se agote, por lo que la conveniencia no es tan buena como la de otras fuentes de energía.
Gas natural, la mejor opción para casas grandes
El gas natural es la mejor opción en términos de precio y seguridad. Además, este gas está disponible en toda España. Este gas es especialmente seguro ya que no hay depósito cerca de la casa. También es interesante en términos de comodidad, ya que una vez instalado, casi no hay que preocuparse por el mantenimiento. En general, el gas natural es más barato cuanto más grande es la casa. En casas con un mínimo de 80 metros cuadrados es el más eficiente energéticamente y cómodo con un consumo anual de 600 euros al año que se eleva a 928 euros al año por un chalet de 120 metros, por ejemplo.
Butano, barato pero no seguro
La calefacción de butano es barata, pero peligrosa y laboriosa de mantener, porque los cilindros de gas son pesados y deben reemplazarse con frecuencia. Aunque su seguridad ha mejorado enormemente en los últimos años, y la mayoría de los hornos tienen sistemas de apagado automático, el butano sigue siendo fatal si nos olvidamos de apagarlo o hay una pérdida en el sistema. Como ocurre con el gas natural, el butano es más eficiente cuanto más grande es la vivienda, especialmente en viviendas de más de 120 metros donde el precio medio anual es de 1.045 euros frente a los 1.938 euros de la electricidad.
Calefacción eléctrica, la más costosa
La electricidad es la fuente de energía más conveniente y segura para los consumidores, pero el coste es, con mucho, el más caro de todas. La calefacción eléctrica cuesta un 50% más que el gas natural, por ejemplo. Y lo mismo ocurre en hogares de todos los tamaños. Según datos de Selectra, el coste medio anual de la calefacción eléctrica es de 856,75 euros al año para un apartamento de 50 metros cuadrados, 1.207 para un apartamento de 80 metros, 1.620 euros para una vivienda de 110 metros de largo, 2.136 euros para uno de 150 metros, 1.928 por una de 120 metros de largo y unos 2.416 euros por un adosado unifamiliar de 150 metros o más.